Carme Bagaria

Recuerdo la calle por donde solíamos
pasear nuestro amor,
cómo se estrechaba, envolviendo
nuestros tiernos besos en la intimidad.
Recuerdo como el frío me empujaba
hacia tu cálido pecho,
aquel confortable abrazo que
no he vuelto sentir nunca más.
¿Dónde yacen las viejas promesas
de amor cuando mueren?
la niebla de los días hace que se pierdan
en el fondo de la memoria,
pero el recuerdo sabe …
El secreto de su sepultura,
y de vez en cuando acude con flores.

Carme Bagaria
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Arrasada por el oleaje
anido en esta incierta playa.

Sólo piedra soy,
el canto mineral
de un recóndito viaje.

Carme Bagaria
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